miércoles, 6 de junio de 2012


Para nadie es un secreto, que un joven evada los temas religiosos, que evada la iglesia. Hoy en día los jóvenes, no se sienten identificados a pertenecer de ella y dar lo mejor de si, para contribuirle.
Es importante resaltar, que una de las causas,  es que la iglesia, siendo muy centrada en Dios, en la formación del hombre, en cuanto a lo espiritual y su moral; ha dejado a un lado el espíritu joven, que podría caracterizar la relación joven iglesia.
El joven  busca libertad, busca expresión, felicidad, diversión; pero si la iglesia no le proporciona lo que el joven quiere, ella no podrá disfrutar de los de sentimientos, obras y acciones que el joven como nadie, podría aportar.
Sin olvidar, claro esta que esta, que todo lo ya mencionado debe ser proporcionado de forma sana, y encaminada a Dios.
Estoy más que segura, que si la iglesia deja el esquema, soltándose más, de tal manera que el joven pueda entrar sin ningún inconveniente.  Podría ser muy exitoso para el mundo. Puesto que, se solucionarían de raíz tantos conflictos vividos, que de una u otra manera han ocurrido, por falta de alguien, que te pueda guiar a un buen camino y por falta de alguien, quien se pueda poner en tu posición, sin reprocharte nada, pero si aconsejándote y encaminándote  a Dios.
Para concluir, la iglesia, puede ser esa mano amiga de los jóvenes, esa mano amiga que el joven necesita , no solo para tener la relación  con la iglesia, la vida sino con Dios.
ANGIE CATALINA SANBRIA DURÁN 11B

martes, 5 de junio de 2012

FE vs. MODA


Aunque a Dios le debemos todo, vemos que el ser humano olvida con facilidad, sobre todo, porque tiene la capacidad de crear y crearse todos los días, una capacidad que fue dada precisamente por el creador, pero la pregunta es, ¿por qué ocurre esto?. A mi parecer, simplemente, por la necesidad de figurar, de sentirse parte de un grupo, de ser aceptado sin reparos, y qué mejor que ser la copia del otro, por este mismo motivo los padres han olvidado hablar de Dios a sus hijos, pues ya por su intelecto, consideran que no es culto o moderno hacerlo.

Ahora, en cuanto a los jóvenes que no tienen un norte seguro, y que no poseen identidad propia, el asunto es más riesgoso, pues fijan sus expectativas en modelos de comportamiento que les representan placeres y sensaciones descontroladas, en donde nada es malo y todo es normal, con lo que se crean vacíos y gran soledad, pues al regresar a la realidad que exige personalidades definidas y un espíritu lleno, se dan cuenta que no tienen las armas para afrontar su realidad.

La mayor arma que tenemos para enfrentar estas presiones sociales, es sin duda creer en Dios, en pocas palabras, tener fe; si tenemos fe y tenemos la seguridad de que Dios existe, sabremos que él nos dará la conciencia por medio de su espíritu para reflexionar sobre lo bueno y lo malo; si tenemos fe, sabremos que no es importante que el grupo nos acepte, sino que Dios nos acepte; si nos importa más Dios que la presión de la sociedad, dejaremos de ser marionetas, que se dejan llevar por la masa, dependiendo siempre del qué dirán. En el momento en que se le abre la puerta a Dios, inicia un cambio en la sociedad.

El arma de la fe se va perdiendo, cuando la gente vive por vivir sin tener en cuenta que cada paso que damos, nos conduce a un destino, que puede ser bueno, malo, feliz o infeliz, dependiendo de nuestra vida y como la vivamos, por esto reflexionemos y retomemos nuestro camino de autenticidad, para que guiados por a gracia y sabiduría de Dios, podamos implementar un cambio en la humanidad.




Natalí Ramírez Giraldo
11-B          

LOS JÓVENES Y LA RELIGIÓN


Son muchos los factores que hoy en día afectan la relación entre los jóvenes y la religión, en primer lugar, podemos hacer referencia a la incontrolable sociedad de consumo en la que actualmente vivimos. Esta sociedad incita fuertemente a los jóvenes al consumo compulsivo, generando en ellos un apetito insaciable de los productos que ofrece el mercado. El gancho comercial que las industrias utilizan es la publicidad en la cual la felicidad se ve reflejada en la adquisición de bienes, siendo esta la felicidad que tanto anhela el ser humano y por esta razón los valores morales se ven desplazados de la cotidianidad provocando una separación entre los jóvenes y la religión que profesa estos valores.

Por otro lado, los continuos avances tecnológicos propios de esta era, producen instrumentos cada vez más asombrosos para el ser humano, tanto que, los llevan a apartarse de las relaciones interpersonales y por ende del camino que lo comunica con Dios.

Sin embargo, hay que tener presente que no sólo la tecnología y la sociedad consumista apartan a los jóvenes de la religión, sino que la globalización también tiene un fuerte grado de influencia en esta separación, puesto que en muchos casos este tipo de actitudes se toman por influencias externas, en otras palabras se toman por moda.

En conclusión es fundamental tener muy presente que aunque son muchas las influencias que pueden provocar la separación de los jóvenes de la religión, es decisión de cada uno asimilar y comprender que una vida plena y feliz, solo es posible alcanzarla bajo la sombra de Dios y es necesario dejar de lado todo aquello que imposibilita una verdadera apreciación del significado de la vida.

Natalia Bernal Quintero
11-B

lunes, 4 de junio de 2012


La tecnología científica y la religión. ¿Una asociación o un conflicto?

Para cualquier esquema social puede haber un equilibrio declarado a partir de los valores y principios de libertad de culto, religión y creencia. Sin embargo, los problemas entre la religión y la tecnología (desarrollada e implementada por científicos) pueden surgir a partir del radicalismo de cualquiera de las dos corrientes.

Por una parte, el radicalismo religioso o práctica muy ortodoxa de la misma, puede traducirse como rechazo total a los recursos ofrecidos por la tecnología en todos los ámbitos, desde la primitiva bombilla, pasando por los medios de transporte y llegando a sofisticados dispositivos computacionales que resultan presa de estas corrientes intolerantes e inquisidoras.

Cambiando de vertiente, algunas corrientes científicas rechazan de lleno cualquier manifestación humana o espiritual de la religión, reduciendo así, los recursos tecnológicos disponibles para sacerdotes, y demás entidades humanas relacionadas con estas prácticas.

A partir de lo visto anteriormente, se puede concluir, que aunque algunas corrientes de parte y parte pueden rechazar su "opuesto", se ha establecido mundialmente una cooperación de una disciplina con la otra. Como ejemplo de esto podemos observar sitios web religiosos, libros digitales, entre otras herramientas que facilitan la vida de los seguidores, practicantes y dirigentes de la iglesia en toda la amplitud del espectro que este engloba.




PARA ALIMENTAR NUESTRA ALMA : http://www.youtube.com/watch?v=EavCvom1huY

PAULA GONZÁLEZ 
ONCE - B


La tecnología y la religión

La tecnología avanzada que se posee actualmente aisla a los jóvenes de la religión, ya que la sociedad consumista en la que vivimos nos ha hecho cambiar las actitudes espirituales que se tenían antes, ahora lo más importante son las cosas materiales y no la cultivación del espíritu que nos ofrece la religión.
Tristemente, los grupos sociales en los que se desenvuleve la persona ejercen presión para que practique una religión o no, el individuo, temiendo ser discriminado puede dejarse llevar por estos comentarios.
Es importante forjar la personalidad y el cáracter de la persona desde sus primeros años, para que cuando se encuentre expuesto a este tipo de situaciones sepa cómo actuar y respete los valores e ideales con los que fue criado.
Esta cultura cibernética que se ha desarrollado en los últimos años está cada vez al alcance de niños de menor edad, ocasionando, además de un aislamiento en las relaciones interpersonales directas, serios problemas de salud. La tecnología es una herramienta muy buena que nos ha sido dada, pero es muy importante saber manejarla y crear hábitos adecuados para su uso.
Tal vez, una forma de que la religión siga estando presente en la vida de los jóvenes podría ser entrando en esta onda cibernética y hacer de su práctica un proceso más dinámico en el que el joven desde su computador pueda tener este contacto con Dios, obviamente sin dejar a un lado la visita al templo, que es de vital importancia, ni a la Eucarístia.


Daniela Aranguren Lesmes. 11B

El hombre y la religión

Actualmente, nos encontramos en una sociedad impulsada por el consumismo y por el capitalismo, y  la idea de felicidad que nos presentan los medios de comunicación radica en la cantidad de bienes que poseemos. Cada anuncio publicitario nos ofrece una aparente felicidad al adquirir ciertos productos, y al ser la felicidad el fin último de todo ser humano, se manipula este estado del hombre para garantizar la primacía y el poderío de unos pocos. Por esta razón, muchos de los valores esenciales para la sana convivencia se ven desplazados de la cotidianidad del ser humano, y por ende, la moralidad en su vida poco a poco se va perdiendo.
Es necesario tener presente, que la mayoría de estos valores se encuentran fuertemente arraigados a la fe que profesa y necesita el hombre en su existencia y sin la cual, su vida carecería de sentido y  horizonte. Pero, como poco a poco se ha ido perdiendo esta esencia moral, el hombre deja de lado su creencia y entra en el escepticismo colectivo apartándose de lo verdaderamente importante, el camino que lo orienta hacia Dios.
Por otro lado, los múltiples avances en la tecnología y en la ciencia que se generan por la insaciable sed de conocimiento del hombre, y hoy en día indispensables para la sociedad de consumo, producen en el hombre un estado de desconfianza hacia todo aquello que no conoce y que le genera miedo (entendido este como la ignorancia hacia lo desconocido). Este estado de desconfianza lo aleja de la incondicional creencia que profesa la religión y por ende termina por introducirse en un estado de ateísmo hacia este tipo de creencias.     
Teniendo en cuenta que la sociedad de consumo también se encuentra estrechamente relacionada con la globalización, las tendencias que se manejan en un lado del mundo terminan por se adoptadas en otros lugares de la tierra, y por esta razón, hay sistemas de pensamiento, que gracias a la difusión de los medios de comunicación, son asimilados por gran parte de la población mundial. Así, que la separación del hombre y la religión se debe en igual medida a lo que comúnmente conocemos por moda.
Para concluir, son muchos los aspectos que afectan la relación del hombre y la religión, y más aún en la edad contemporánea a la cual pertenecemos. Sin embargo, es necesario que hagamos un análisis de la manera en que estamos viviendo esta época con el fin de no perder la esencia que nos caracteriza como seres humanos y para poder entender que muchas veces el camino hacia una vida plena y feliz se encuentra de la mano de Dios.  

Maria Angelica Ospina Sierra. Once B

domingo, 3 de junio de 2012

LA FE Y LA TECNOLOGÍA

LA FE Y LA TECNOLOGÍA:

ENCONTRAMOS DOS TIPOS DE DEFINICIONES ACERCA DE LA FE:


1. Reanudamos el tema sobre la fe. Según la doctrina contenida en la Constitución Dei Verbum, la fe cristiana es la repuesta consciente y libre del hombre a la auto-revelación de Dios, que llegó a su plenitud en Jesucristo. Mediante lo que San Pablo llama -la obediencia de la fe" (cfr. Rom 16, 26; 1, 5: 2 Cor 10, 5-6), todo el hombre se abandona a Dios, aceptando como verdad lo que se contiene en la palabra de la divina Revelación.

2. La fe es obra de la gracia que actúa en la inteligencia y en la voluntad del hombre, y, a la vez, es un acto consciente y libre del sujeto humano. La fe, don de Dios al -hombre, es también una virtud teologal, y simultáneamente una disposición estable del espíritu, es decir, un hábito o actitud interior duradera. Por esto exige que el hombre creyente la cultive siempre, cooperando activa y conscientemente con la gracia que Dios le ofrece. Juan Pablo II, 19-VI-85

En primera instancia, la tecnología nos ha permitido hacer las cosas más fácil y más rápido, dándole una gran importancia hoy en día. Tanto así que ya la diferencia entre la vida urbana y la rural es mínima. Es por eso que la mayoría de personas se dedican al desarrollo de la ciencia y la tecnología, buscando lo asombroso; piensa un autor que esto no tiene por qué afectar negativamente a la fe, dice que tiene el poder de favorecerla, “estos avances permiten descubrir con más profundidad aún los dones de Dios y a agradecer, en concreto, la capacidad que Él ha dado a la inteligencia humana”.  
 

Pero  también nos dice que “pueden sacar la conclusión de que el hombre lo puede todo y que Dios no es necesario en su vida”. A pesar de que eso, piensa que el desarrollo debería favorecer a la fe en cuanto a “elevar su preparación  intelectual y liberal “para sobrevivir; pero para mí la tecnología ha hecho más que eso.

Pienso que la tecnología con relación a la fe nos ha dado un avance y nos ha permitido encontrar más información y preparación acerca a ella de una forma ágil. Pero también ha logrado que los algunos jóvenes se acerquen o se alejen de la fe de Dios.


Carolina Chacón Ulloa.  11B