La tecnología desde siempre ha sugerido
unificar o destituir estereotipos sociales políticos y religiosos.
Dando una mirada
al ejercicio espiritual y trascendente de la religión, la tecnología entonces
entra a entablar condiciones para reafirmar o renunciar a creencias, pues es
por ella que muchas de los creyentes o seguidores, de cualquiera que sea su
religión, difunden y desmeritan lo que según ellos es lo verdadero.
Desde este punto
es posible sugerir que la tecnología entonces puede ser herramienta esencial
para lograr unificar o desmantelar la religión y sus planteamientos; y más aún
con ideales y pensamientos tan variables como de quienes aún no aseguran
con fervor sus creencias, pues es trivial encontrar sujetos que cambian de dogmas
con el simple hecho de leer o escuchar acepciones mediocres o falsas de
cualquier emisor.
María Camila Cortés Rodríguez - 11 B
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