EL SENTIDO DE LA VIDA

EL SENTIDO DE LA VIDA

Alguna ves te has preguntado:•    ¿que sentido tiene la vida?
•     ¿cual es sus propósito?

Son preguntas que en algún momento de nuestra vida se nos han pasado por la mente y que no hemos podido contestar ¿porque?Sencillamente por que no tenemos la respuesta a estas preguntas o por que solo el tiempo nos las puede dará. Encontrarle el sentido a la vida y sus propósito puede tomar “toda la vida” sin embargo si los jóvenes cuentan con unas solidas bases que sus padres les han brindaron y que hoy en día les permiten vivir y resolver sus propios problemas de una manera clara y segura logrando alcanzar su madurez.Para comprender mejor el sentido de la vida y sus propósito se presentan algunos elementos que nos permiten darle un significado mejor a estas preguntas. 

1. Tomar la vida tal como es : Es decir, como un regalo como una de las grandes bendiciones que Dios nos regala cada día por eso lo que hagamos con nuestra vida depende de nosotros de lo que hemos aprendido desde nuestro hogares,si nosotros mismos valoramos la vida y hacemos de ella un don especial para tomar con alegría.
2.   Asumir nuestras propias responsabilidades de nuestra vida: Si conocemos y valoramos al 100 % nuestra vida tan bien hay que saberla mantenerla o llevarla ¿como? reconociendo y cumpliendo con los deberes que nos corresponden logrando ver la vida como un reto diario que vale la pena luchar por mas difícil que sea.

EL SENTIDO DE LA VIDA 

ASUME TUS PROPIAS RESPONSABILIDADES 

EN MI OPINION: 
El sentido de la vida  es un regalo que Dios nos brinda, y sin embargo nosotros no sabemos darle una verdadera importancia ya que solo nos dedicamos a maldecirla o simplemente a quitarnos la vida.NO somos consiente del don tan grande que es vivir no tenemos la suficiente madurez para comprenderlo con el simple hecho de ser adultos no nos impide dejar de se inmaduros y no reaccionar frente a los mas importante que es el saber vivir . 

SANTO TOMAS DE AQUINO:


(Llamado Doctor Angélico; Roccaseca, actual Italia, 1224-Fossanuova, id., 1274) Teólogo y filósofo italiano. Hijo de una de las familias aristócratas más influyentes de la Italia meridional, estudió en Montecassino, en cuyo monasterio benedictino sus padres quisieron que siguiera la carrera eclesiástica. Posteriormente se trasladó a Nápoles, donde cursó estudios de artes y teología y entró en contacto con la Orden de los Hermanos Predicadores.En 1243 manifestó su deseo de ingresar en dicha Orden, pero su familia se opuso firmemente, e incluso su madre consiguió el permiso de Federico II para que sus dos hermanos, miembros del ejército imperial, detuvieran a Tomás. Ello ocurrió en Acquapendente en mayo de 1244 y el santo permaneció retenido en el castillo de Santo Giovanni durante un año. Tras una queja de Juan el Teutónico, general de los dominicos, a Federico II, éste accedió a que Tomás fuera puesto en libertad. Luego, se le permitió trasladarse a París, donde permaneció desde 1245 hasta 1256, fecha en que obtuvo el título de maestro en teología.

SANTO TOMAS DE AQUINO

Durante estos años estuvo al cuidado de Alberto Magno, con quien entabló una duradera amistad. Les unía -además del hecho de pertenecer ambos a la Orden dominica- una visión abierta y tolerante, aunque no exenta de crítica, del nuevo saber grecoárabe, que por aquellas fechas llegaba masivamente a las universidades y centros de cultura occidentales. Tras doctorarse, ocupó una de las cátedras reservadas a los dominicos, tarea que compatibilizó con la redacción de sus primeras obras, en las cuales empezó a alejarse de la corriente teológica mayoritaria, derivada de las enseñanzas de san Agustín.
Santo Tomás de AquinEn 1259 regresó a Italia, donde permaneció hasta 1268 al servicio de la corte pontificia en calidad de instructor y consultor del Papa, a quien acompañaba en sus viajes. Durante estos años redactó varios comentarios al Pseudo-Dionisio y a Aristoteles, finalizó la Suma contra los gentiles, obra en la cual repasaba críticamente las filosofías y teologías presentes a lo largo de la historia, e inició la redacción de su obra capital, la Suma Teológica, en la que estuvo ocupado entre 1267 y 1274 y que representa el compendio último de todo su pensamientos.Tomás de Aquino supo resolver la crisis producida en el pensamiento cristiano por el averroísmo, interpretación del pensamiento aristotélico que resaltaba la independencia del entendimiento guiado por los sentidos y planteaba el problema de la doble verdad, es decir, la contradicción de las verdades del entendimiento y las de la revelación. En oposición a esta tesis, defendida en la Universidad de París por Siger de Brabante, afirmó la necesidad de que ambas fueran compatibles, pues, procediendo de Dios, no podrían entrar en contradicción; ambas verdades debían ser, además, complementarias, de modo que las de orden sobrenatural debían ser conocidas por revelación, mientras que las de orden natural serían accesibles por el entendimiento; filosofía y teología son, por tanto, distintas y complementarias, siendo ambas racionales, pues la teología deduce racionalmente a partir de las premisas reveladas.A medio camino entre el espiritualismo agustiniano y el naturalismo emergente del averroísmo, defendió un realismo moderado, para el cual los universales (los conceptos abstractos) existen fundamentalmente in re (en las cosas) y sólo formalmente post rem (en el entendimiento). En último término, Tomás de Aquino encontró una vía para conciliar la revalorización del mundo material que se vivía en Occidente con los dogmas del cristianismo, a través de una inteligente y bien trabada interpretación de Aristóteles.

NOMBRE: Laura Patricia Baez Macias.

CURSO: Décimo D.